23.7.08


Era demasiado crio como para enamorarse.Pero como siempre lo llevaban todos los veranos a la playa, el muy ingenuo se enamoró de una sirena y con alma de conquistador le mandaba barquitos de papel con poemas.Su corazón esperaba cada marea.De poco le sirvió que años, muchos años más tarde, le dijeran que eran seres mitológicos ke no existían y él se reía porque unos de sus barcos regresó con una marca de carmín en la proa..
Para Manuel con cariño :)que no hace ni 5 minutos que lo conozco

No hay comentarios: